La Iglesia de San Nicolás de Bari, joya artística en la Sierra Norte, destaca por su riqueza cultural, habiendo sorteado la Guerra Civil. Su origen se remonta al siglo XV, sucediendo a una estructura anterior. La capilla gótica, con bóveda de crucería de piedra vista, evidencia su antigüedad y encanto.
Construida con mampostería de sillarejo, resalta su esbelta espadaña que alberga las campanas. La portada exterior, de estilo mudéjar, invita a través de un arco de entrada de medio punto.
El interior alberga tesoros como una pila bautismal medieval y un retablo barroco en el presbiterio, enriqueciendo la experiencia de quienes exploran este tesoro arquitectónico.